El Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires y posteriormente la Pinacoteca del Estado de Sao Paulo en Brasil acogen la exposición: De Picasso a Barceló: la colección del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, siglo XX que, como su título indica, acota el principio y final del arte del siglo XX español con un periodo con dos artistas marcadamente polifacéticos. A través de una organización cronológica, la muestra hace partícipe al público argentino y brasileño de la riqueza de los últimos cien años de arte en España.
Con un total de ciento siete obras expuestas, la muestra comienza con las aportaciones cubistas de Pablo Picasso, María Blanchard, Juan Gris, Julio González y Pablo Gargallo, grupo que desarrolla su actividad en París a comienzos del siglo XX. Al tiempo, Joan Miró y Salvador Dalí, están presentes como representantes del surrealismo. Todos ellos protagonizan la exposición Españoles en París, celebrada en 1999 en la Fundación Marcelino Botín de Santander, y en la que se exhiben también algunas obras de la Colección del Museo Reina Sofía.
A Dalí y Miró se suman Leandre Cristòfol, Óscar Domínguez y Ángel Ferrant en el apartado dedicado a la práctica surrealista. En paralelo al desarrollo de la vanguardia en París, en España se encuentran los participantes del Noucentisme y el Ultraísmo, artistas como Rafael Barradas, Manuel Hugué, José Gutiérrez Solana, Joaquín Torres García y Daniel Vázquez Díaz. Al mismo tiempo, el Surrealismo encuentra eco en la denominada Escuela de Vallecas, representada en la muestra por Juan Manuel Díaz Caneja, Maruja Mallo, Benjamín Palencia y Alberto Sánchez, al que el Museo Reina Sofía dedica una completa retrospectiva de manera simultánea a esta exposición.
La España de la posguerra está presente a través de dos grandes grupos en esta muestra. Por un lado, la generación abstracta en la que se incluyen grupos como Dau al set, con un Antoni Tàpies aún surrealista, que más tarde encabeza el Informalismo en España. También figura el grupo El Paso, al que pertenecen entre otros Antonio Saura, Manuel Millares y Martín Chirino. También están presentes los nuevos escultores vascos como Eduardo Chillida y Jorge Oteiza. Por último, figuran aquellos como Lucio Muñoz, Manuel Hernández Mompó, Albert Ràfols-Casamada, Gerardo Rueda, Gustavo Torner y Fernando Zóbel, que se concentran hacia 1966 en torno al germen del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca.
Por otro lado, se plantea la figuración que se desarrolla a lo largo de la década de los sesenta, con artistas como Eduardo Arroyo, Equipo Crónica, Luis Gordillo, Carmen Laffón, Antonio López García y Cristino de Vera, entre otros.
Con la llegada de la democracia, el arte español se universaliza. Bajo la denominación "Últimas Generaciones" se seleccionan pintores como Alfonso Albacete, Carlos Alcolea, Miquel Barceló, Guillermo Pérez Villalta, José María Sicilia, Juan Uslé o Miguel Ángel Campano, al tiempo que se ofrece una selección de escultores protagonistas de las nuevas tendencias como Juan Muñoz, Susana Solano, Eva Lootz, o Cristina Iglesias, entre otros.
De este modo, la selección de obras pertenecientes a la colección del Museo Reina Sofía plantea un completo recorrido por las transformaciones en el Arte Español del siglo XX.
Datos de la exposición
Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires (Argentina) (16 junio - 17 julio, 2001); Museo Manuel da Nobrega, São Paulo (Brasil) (31 julio - 16 septiembre, 2001)