José Damasceno

Damasceno pertenece a una generación de artistas brasileños que ha sabido crear un lenguaje propio sin renunciar al influjo de sus predecesores, como Lygia Clark, Helio Oiticica o Cildo Meireles, al saber combinar esa misma poética sensorial e interactiva, con un universo personal, donde los guiños al surrealismo o al humor son frecuentes. Desde los primeros años noventa, la obra de Damasceno se ha expuesto en instituciones tan relevantes como el Museum of Contemporary Art de Chicago, el Palais de Tokyo en París o el Museu de Arte Moderna de São Paulo, así como en las bienales de Venecia, Sidney o São Paulo.

Damasceno ha aceptado el reto propuesto por el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, de concebir un proyecto que interactúe no sólo con el espacio, sino que por primera vez lo haga además con el público y le haga partícipe de sus indagaciones, de forma que se generen nuevos contextos y diálogos y active el espacio público como lugar de creación artística y de pensamiento. Coordenadas y apariciones es un proyecto en el que el artista se plantea un circuito de distintas intervenciones creadas para los espacios públicos y lugares de tránsito del edificio –pasillos, escaleras, jardín, patio, fachada, tienda y biblioteca–, a modo de diálogo directo con el visitante que transita fuera del marco expositivo.

Cada una de las instalaciones planteadas por el artista para esta exposición tiene su propia trayectoria, una evolución y una historia que concluyen en el momento de su instalación en el espacio, así como en la invitación que se hace al espectador a reflexionar sobre lo que sucede en estas coordenadas donde se encuentran ubicadas, y cuestionar a su vez los espacios y los desplazamientos a lo largo del Museo. Este proyecto se convierte de esta manera en una posibilidad de repensar lugares, trayectos y posiciones, así como la ubicación del arte y su relación con los visitantes.