Madrid 1937 (Aviones negros)

En la segunda planta del Pabellón Español de 1937 se presentó una selección de obras de clara intención propagandística y de denuncia de la dolorosa situación bélica. Aunque convivirán diversas tendencias artísticas, el realismo será predominante, al considerarse más adecuado para las intenciones propagandísticas del Pabellón. Madrid 1937 (Aviones negros) fue una de las obras más exitosas, en la que su autor, Horacio Ferrer, recurre, al igual que Pablo Picasso, a la imagen de las mujeres huyendo con sus hijos en brazos. No obstante, el lenguaje elegido no puede ser más diferente al del Guernica. Ferrer, formado en Italia, recurre al estilo de dibujo preciso e impersonal de la Nueva Objetividad alemana, con la que comparte también su sentido de crítica social. Además, Ferrer incluye una referencia a la protagonista de una pintura de historia, muy conocida por el público francés, la Marianne de La Liberté guidant le peuple (La Libertad guiando al pueblo, 1830) de Eugène Delacroix, que se trastoca aquí en la madre clamando al cielo contra los bombardeos.



Raúl Martínez Arranz