El movimiento, la velocidad como referencia de la modernidad y la máquina como símbolo del progreso tecnológico han estado presentes desde los inicios del discurso artístico de
La muestra recorre la presencia del Cinetismo desde los inicios de la modernidad hasta las últimas manifestaciones artísticas. Por ello explora mediante una perspectiva transversal su presencia a lo largo de más de un siglo, lejos de las estrictas periodicidades y clasificaciones tradicionalmente establecidas, deteniéndose en corrientes como el Futurismo, el Constructivismo, el Dadaísmo o el Surrealismo, lo que permite incorporar artistas no considerados técnicamente como cinéticos, pero que han jugado un importante papel a la hora de sentar las bases históricas de lo que se entenderá luego como Movimiento Cinético. Es el caso de Duchamp, Moholy-Nagy, Balla, Man Ray, Dalí o Calder. En la exposición se recoge también la huella del Cinetismo en el arte más reciente, estableciendo conexiones formales con artistas más jóvenes.
Por otra parte la exposición desea reinterpretar el alcance y significado del Cinetismo en América Latina como aportación propia al discurso general del arte moderno. El primer gesto proto-cinético en América Latina, se produce en Buenos Aires en 1944, cuando el artista Gyula Kosice crea una escultura móvil semiarticulada que exige la participación activa del espectador. Con el objetivo de rescatar la importancia de los artistas latinoamericanos en la corriente cinética, se redefine en la muestra la participación continental latinoamericana dentro del movimiento y se incorporan al proyecto, además de sus figuras más relevantes, muchas otras que no han tenido igual fortuna crítica. 'Lo[s] Cinético[s]' se erige, en este sentido, en un espacio que intenta resquebrajar la visión eurocéntrica del arte del siglo XX y destacar el reconocimiento de artistas latinoamericanos que realizaron una importante contribución al arte universal.
Datos de la exposición
Instituto Tomie Ohtake, São Paulo (14 noviembre 2007 - 10 febrero, 2008)